RAMILLETE
TUBEROSA
Su falda, más coqueta por sencilla,
Riela con visos malva, y cada paso,
En un breve relámpago de raso
Marca el relieve audaz de la rodilla.
Erige osadamente el busto escaso
Una impúber miseria; arde la hebilla
Del morado sombrero; en la sombrilla
Gris, pululan los oros del Ocaso.
La mano en guante perla y fino encaje,
A la estricta cadera ciñe el traje.
El césped otoñal, con tonos serios,
Con un triple senil se desiguala.
Y sobre ese tapiz de hierba rala
La inquietante botina tasa imperios.
Leopoldo Lugones