INVOCACIÓN A HERAKLES
¡Herakles, ven! ¡El mundo necesita
de tu vigor! ¡El mundo languidece!
¡Ya no tenemos majestad y crece
la furia de los átomos, maldita!
¡Herakles defensor: ven a la cita
que te damos los muertos! ¡Aparece
con tu maza de roble, y engrandece
la libertad y las cadenas quita!
Y el semidiós de la cobriza barba,
sobre la tierra miserable escarba
en busca del genésico tesoro
de la existencia. Rompe los linderos
y alarma a los atómicos guerreros
con sus grandes testículos de toro.
Germán Pardo García